3 minutos
Las necesidades de agua son variables para cada persona, en función de la edad, si sufre alguna patología, los hábitos alimentarios, la actividad física que realice, las condiciones de temperatura y humedad ambiental, etc (1).
La deshidratación se debe a la pérdida excesiva de agua y otros líquidos para el funcionamiento saludable del cuerpo. La sed no es un indicador fiable de la necesidad de ingerir líquidos, ya que aparece cuando el sujeto se encuentra levemente deshidratado. Por lo tanto, para garantizar una correcta hidratación, el individuo se debe anticipar a las necesidades del cuerpo y no esperar a tener sed. La hidratación debe ser constante durante todo el día (2). Las ingestas de agua como de otros líquidos se pueden repartir en diferentes momentos del día: al levantarse, a media mañana, en la comida del mediodía, durante la tarde, en la cena y al acostarse.
Cuando nos encontramos en la época de calor, suben las temperaturas y debemos extremar las precauciones. Además, hay que tener especial cuidado y vigilar a los grupos de población con mayor riesgo, entre los que se encuentran los bebés.
Los profesionales de la salud tienen un papel primordial para educar a la población de la importancia de estar correctamente hidratados. Por este motivo, en épocas donde hay olas de calor hay que recalcar su trascendencia.
Las causas más comunes de la deshidratación entre la población son no beber suficiente agua ni otros líquidos, no comer alimentos ricos en agua, las altas temperaturas, sudar mucho, orinar demasiado, tomar ciertos fármacos, tener fiebre, padecer diarrea y sufrir vómitos (3).
Los síntomas habituales de la deshidratación son la sed, tener la boca seca, retener demasiado la orina, orinar de color oscuro, sequedad de las mucosas y la piel (4).
También otras consecuencias más graves son referir dolor de cabeza, somnolencia, fatiga, mareos, desmayos, espasmos musculares y mantener una respiración acelerada (4).
Ofrecer leche materna a demanda durante al menos los primeros 6 meses de vida protegerá al bebé de la deshidratación, pero es importante que los profesionales de la salud informen a las familias de cuáles son los signos de alerta por si fuera necesario acudir al centro médico ya que los lactantes son más sensibles al calor que los adultos (6,7).
En conclusión, las altas temperaturas pueden afectar a toda la población, pero hay que tener especial cuidado con los bebés. Los aspectos más relevantes son mantenerse bien hidratado, prestar atención a las señales del bebé y cuidar el contacto piel con piel. Así, el profesional de la salud debe advertir que las guías recomiendan lactancia materna exclusiva hasta los 6 meses, y para garantizar el correcto crecimiento del bebé y el desarrollo de la madre, los dos deben estar bien hidratados.
Monedero MJ, Jesús P, Minagorre A. Protocolo: Tratamiento de la deshidratación y los trastornos electrolíticos en pediatría.
Daley SF, Avva U. Pediatric Dehydration. StatPearls [Internet]. 8 de junio de 2024 [citado 18 de julio de 2024]; Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK436022/
15 Enero 2024
6 minutos
A partir de los 6 meses, la criatura ya empieza a incorporar alimentos (sólidos, en el caso del BLW) en su dieta, aunque continúa con lactancia a demanda. Esos alimentos hay que manipularlos en origen (compra, recogida en huerto, etc.), transporte, almacenamiento y preparación, antes de que se los ofrezcamos en el plato adaptado. En esa secuencia de tiempo hay que vigilar que se cumplan unas adecuadas condiciones higiénico y sanitarias para que nuestro bebé crezca saludablemente y sin eventos patológicos como una diarrea (1).
Pautas que debemos seguir:
La criatura continuará con lactancia a demanda, con tomas ...6 Septiembre 2023
4 minutos
La ingesta de agua a partir de los 6 mesesA partir de los 6 meses de la criatura, la EFSA estimó una ingesta total de agua (procedente de alimentos y lactancia materna o artificial) en relación con los referentes de ingesta de lactantes procedentes de países de la UE (aunque eran pocos y diferían en la metodología de la evaluación). La media de ingesta diaria total de agua en lactantes varones sanos a la edad de 9 y 12 meses fue de:
834 ml o 93 ml por kg de peso corporal al día, para bebés de ...